Jorge Ramos, periodista de Univisión, preguntó hace varios meses a Rafael Correa si Fidel Castro es un dictador. “Cuba tiene su forma de democracia…”, contestó Correa.
En esa entrevista Correa mostraba su admiración hacia el gobierno cubano. En su reciente visita a Cuba, Correa ratificó su fascinación por lo que llamó “el indudable éxito cubano”.
Sus elogios hacia la dictadura cubana me avergonzaron y preocuparon.
Me avergonzó ver a un Presidente, que se dice demócrata, rendir tal efusivo homenaje a una dictadura de 50 años. Dictadura que ha violado y viola las más elementales libertades y derechos humanos de los cubanos.
Me preocupó constatar que el sueño de Correa es parecernos a Cuba. Correa desnudó, con más claridad que antes, su ideología contraria a los más elementales derechos del individuo. Dijo que de nada vale el talento humano cuando cada quien busca su fin de lucro o su proyecto personal. Que el talento humano debe ser articulado en un proyecto nacional único, como en Cuba. ¡Qué miedo!
El país ideal de Correa es uno donde todos trabajemos para un plan nacional que él definirá desde las alturas del poder. La libertad de cada individuo para trabajar en sus proyectos personales y alcanzar éxito económico es una tontería.
Ante tan alarmantes declaraciones, recomiendo que en su próximo viaje a Cuba, en lugar de codearse con funcionarios del gobierno alejados de la realidad, Correa visite a Yoani Sánchez. Con ella, aprendería mucho de la Cuba que no quiere ver.
Yoani Sánchez escribe el blog Generación Y, visitado por millones de lectores del mundo entero. Ganó el Premio Ortega y Gasset de periodismo digital, pero la dictadura cubana no le permitió viajar a España a retirar su premio. La revista Time la escogió entre las cien personas más influyentes del año 2008.
Yoani escribe sobre la Cuba de hoy, su realidad, sus batallas cotidianas, sus carencias, sus infinitos trámites burocráticos, su falta de libertad, sus atropellos, sus alegrías, sus ironías, su estancamiento. En un reciente texto cuenta que para celebrar los 50 años de la revolución, los cubanos pudieron comprar, a través del sistema de racionamiento, media libra de carne molida. Y comenta: “Un proceso político de la envergadura de una revolución socialista debería aspirar –en su cincuenta aniversario– a resultados más ambiciosos… Aunque parezca una frivolidad, para muchos cubanos la venta de esa carne de vaca fue el hecho más importante ocurrido por estos días.”
Estoy seguro que Correa y Castro comieron bastante más que carne molida. El comunismo y las dictaduras se disfrutan mucho desde el poder.
Yoani ni siquiera puede ver su propio blog. Está bloqueado en Cuba y el acceso a internet limitado. En ese país, que según nuestro Presidente es ejemplo de éxito, solo hay espacio para la información oficial del diario Granma.
En nuestro país todavía vivimos en libertad. Tenemos varios diarios que nos reportan la realidad nacional. Nadie controla nuestro ingreso a internet. Podemos comer o leer lo que queremos. Podemos montar nuestro negocio propio y ganar dinero. Las fronteras están aún abiertas.
Pero, ¿podemos confiar que esta libertad durará con un presidente que admira tanto la dictadura cubana?
2 comentarios:
Como ecuatoriana senti vergüenza ver toda la payasada de la visita de Correa en Cuba celebrando una revolución que lo único que hizo durante estos 50 años es empobrecer a un pueblo
Pero al parecer los ecuatorianos estamos ciegos...
estos no son socilistas, son solo oportunistas...
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