“El gerente de una fábrica llamó a un técnico para que repare una importante máquina. Tras observarla un momento, el técnico apretó un botón. Y la máquina volvió a funcionar. Antes de irse, el técnico entregó al gerente una factura por mil dólares. ¡Mil dólares solo por apretar un botón!, se quejó el gerente. Ante la insistencia, el técnico escribió otra factura más detallada. Decía así: apretar un botón, un dólar; saber qué botón apretar, 999 dólares”.
Esta historia, que alguna vez leí, muestra que el valor del trabajo de una persona no lo da el tiempo que toma hacerlo, sino los resultados. La preparación, conocimientos y experiencia nos permiten ser más productivos, hacer un mejor trabajo y ser retribuidos por ello, más allá de las horas o minutos que nos tome.
Esto que parece lógico, no cuadra con el socialismo del siglo XXI, según su creador Heinz Dieterich. Para Dieterich, que nos acaba de visitar, el valor del trabajo o un bien lo determina el tiempo invertido. Así, algo que toma cinco horas fabricar debe ser siempre más caro que lo que toma solo minutos. De igual forma, un gerente que trabaja ocho horas diarias, debe recibir lo mismo que el conserje que trabaja el mismo número de horas.
Para Dieterich, la oferta y demanda o la calidad del producto son secundarias. Las cualidades, preparación o experiencia de una persona importan poco. Lo que realmente importa al momento de valorar algo es el tiempo de trabajo.
Que se propongan estas ideas no es el problema. El problema es que la gente las tome en serio. Y peor aun, que líderes como Chávez las tomen muy en serio y que en nuestra ilógica Latinoamérica se conduzcan planes de gobierno con ellas.
El presidente Rafael Correa también se proclama seguidor del socialismo del siglo XXI. Sus discursos ponen al Estado y la sociedad por encima del individuo y mucho de lo que dice va en esta línea antimercado de Dieterich. Sin embargo, resulta difícil pensar que nuestro Presidente apoyaría, por ejemplo, que los choferes que manejan buses entre Guayaquil y Quito ganen más que los pilotos de avión que cubren la misma ruta, argumentando que el viaje de los choferes requiere más horas de trabajo.
Sí preocupa, en cambio, que el cacareado socialismo del siglo XXI de este Gobierno siga los planteamientos generales de lo que Dieterich propone.
Es decir, un sistema que rechaza la propiedad privada. Un sistema donde enriquecerse es un mal que debe terminar, para dar paso a un individuo que debe vivir y trabajar en función de un plan social impuesto desde arriba, y no en función de sus propios deseos, gustos y ambiciones. En otras palabras, un sistema igualito al fracasado comunismo de siempre, pero empaquetado distinto.
Asusta pensar que este Gobierno se tome en serio estas teorías para conducir al país… Aunque pensándolo mejor, ya que estamos en esta onda socialista del siglo XXI, por qué no aplicarlo para tomarnos la vida con más calma. Trabajaremos por largas horas sin apuros, ni estrés, ni competencia.
Total, ahora solo importa que el tiempo corra. Nuestras horas de ineficiencia serán premiadas, aunque al final del día ni sepamos qué botón presionar. Sería todo mejor, ¿o no?
6 comentarios:
Excelente.
Tengo simplemente terror que esta estupidez del siglo XXI sea impuesta en nuestro pais...Correa ha demostrado ser un burro en la economía...Que Dios nos salve porque la manada de borregos ignorantes lo seguirá siempre, tal como en Venezuela con el coronel. Luego de 10 años de sufrir esta experiencia el pueblo querra otra revolución. Te agradezco Manuel porque con tu pluma sacas de la ignorancia cada semana a mas borregos del corral de Correa
creo que en este blog no deberia permitirse comentarios de tinte especista.
por que chantarles la estupidez humana a burros y borregos q a nadie hacen danio y q mas bien viven oprimidos x bestias humanas?
dirac, eres ESPECISTA!!!
t pido q utilices otros apelativos para describir lo expresado.
disculpa si te cayo el guante...me imagino que eres uno de esos...
Por si lo ignoras el borrego sigue siempre a su pastor sin importarle nada...
Como tipico Correista te fuiste por la tangente y nunca debatiste argumentos...
Eres una lastima
ay por favor. solo xq t increpe algo asumes q soy "correista". yo soy activista en pro-liberacion animal y creo q esta causa esta mas relacionada con nuestra civilizacion y sus penurias q lo q muchos arriesgan analizar. se mas objetivo al emitir tus comentarios la proxima vez
Sr. Manuel Lecaro,
Gracias por aportar su puntos de vista, difiera o concuerde con usted concluyo que el escritor es el reflejo de sus palabras.
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